Aprovechando el fin de semana y el buen tiempo que todavía disfrutamos, me acerqué con mi familia a pasear por las riberas del Tajo a su paso por Toledo. No quiero ni hablar del color del río ni del "aroma" que este desprendía, pues no son plato de buen gusto (el agua limpia y el caudal digno se van para Levante, a nosostros nos queda el "arroyito" lleno de porquería), pero si quiero hablar del aspecto que presentaba el paseo en sí y la llamada "senda ecológica".
Las riberas del Tajo fueron "adecentadas" hace unos 15 años con una inversión del Banco Europeo de cerca de 1000 millones de pesetas, creando un paseo con losas de granito, varias escaleras de acceso al río (curioso esto, porque a ver quién es el "majo" que se atreve a meterse en él, excepción hecha del Sr. Barreda que hace un año se fotografió para el diario El País con los pies dentro del agua, sólo los pies porque el caudal que pasa por Toledo no daba para más; si lo hubiese hecho en el canal del Trasvase podría haberse metido entero), algunos porches de madera, bancos, fuentes, árboles... El problema es que desde entonces no se ha hecho prácticamente nada para mantener esas riberas en un estado medianamente digno, aunque entrando desde el Barco Pasaje hay un bonito cartel que dice "Plan de Mantenimiento de las riberas del Tajo", firmado (sin fecha eso si) por el Ayuntamiento de Toledo, el SEPECAM y la Junta de CLM.
La llamada senda ecológica que sale al final del paseo, debajo del Conveto de Gilitos, daría para una película de terror. Por supuesto, ni se le ocurra al intrépido paseante intentar entrar en ella con una carrito de niño, bastante tendrá si tiene el valor suficiente para entrar él solo andando... o reptando, porque los árboles y arbustos no permiten en algunos tramos ni entrar erguido.
Baldosas levantadas, árboles enteros muertos y en el suelo, suciedad, arbustos y hierbas que todo lo invaden, porches sin pintar y con la madera sucia y abandonada, suelos de hormigón rajados.... y aun así siempre se ve a gente paseando... y viviendo, pues en un recobeco oculto pudimos observar una tienda de campaña en la que alguien ha montado "su casa".
Ahora, y con dos meses de retraso sobre la fecha prometida públicamente por el Sr. Alcalde de Toledo, la empresa TRAGSA ha empezado con la limpieza de las riberas a su paso por Toledo, iniciando la labor en la zona de Safont. Según la Confederación Hidrográfica del Tajo, se van a invertir unos dos millones de euros en la limpieza y, también según la CHT, ese dinero estaba disponible para esa labor en el momento en que se hubiese pedido (los cauces y riberas de los ríos son competencia de las Confederaciones Hidrográficas). ¿Por qué entonces nunca hasta ahora se ha llevado a cabo esa limpieza? ¿Volverán a pasar otros 15 años para que se vuelvan a limpiar y adecentar las riberas? ¿el Ayuntamiento tiene pensado un Plan de Mantenimiento permanente?
Para que todo esto no parezca un mensaje fijándome sólo en lo malo, tengo que decir que las papeleras son vaciadas con bastante frecuencia. Algo es algo
lunes, 17 de septiembre de 2007
Paseando junto al Tajo
Publicado por Unknown en 10:21
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1 comentario:
La verdad es que las riberas de los ríos a nivel general no suelen limpiarse con la frecuencia requerida, y al final cuando se ponen a ello el coste es mayor.
Aunque no soy un experto en el tema, bien creo que de llevarse con más frecuencia este tipo de limpieza, quizás cada cuatro años por ejemplo, conseguiríamos unas riberas hermosas y transitables para todos.
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